La referente en seguridad alimentaria recibió el título de Doctora Honoris Causa de la Universidad Nacional de Rosario, en reconocimiento a su lucha en la búsqueda de un cambio de paradigma en la producción, distribución y consumo de los alimentos.
Miryam Kurganoff de Gorban recibió la máxima distinción académica, el título de Doctora Honoris Causa de la Universidad Nacional de Rosario. La distinción fue propuesta por la Escuela Agrotécnica de Casilda en reconocimiento a su tarea de promoción de la Soberanía Alimentaria y su acción militante y pedagógica en torno a la problemática.
Soberanía Alimentaria es un concepto propuesto por Vía Campesina, en 1996, que ofrece una alternativa surgida del campesinado y las organizaciones sociales de los países empobrecidos, a las políticas neoliberales vigentes en América del Sur. Este paradigma se basa en el derecho de los pueblos de definir sus propias políticas y estrategias sustentables de producción, distribución y consumo de alimentos, que garanticen el derecho a la alimentación para toda la población, con base en la pequeña y mediana producción, respetando sus propias culturas y la diversidad. Se basa en una agricultura agroecológica, biodiversa y soberanamente independiente, que reemplace la agroindustrial, a gran escala y de homogeneizante, basada en la tecnología de insumos y dirigida a la exportación.
Kurganoff de Gorban es licenciada en nutrición, docente de la UBA, y fue impulsora de la creación de la red de Cátedras de Soberanía Alimentaria (CALISA) que tiene presencia en 49 universidades públicas de Argentina. En la Universidad Nacional de Rosario, la Cátedra Libre de Soberanía Alimentaria se dicta desde 2017 y está radicada en la Facultad de Ciencias Veterinarias y de la Escuela Agrotécnica.
La entrega del títlo de Doctora Honoris Causa estuvo a cargo del rector Franco Bartolacci, y fue madrina de este acto, la directora de la Escuela Agrotécnica Libertador General San Martín, Graciela Mandolini.
El Rector sostuvo que la distinción que la UNR otorga a Miryiam Kurganoff de Gorban es un reconocimiento a su militancia y a los debates que son indispensables dar y profundizar. “Cuando elegimos a quien reconocemos estamos definiendo cuales son los valores que nos definen como institución, por lo que es necesario que la Universidad Nacional de Rosario tome las banderas de la Soberanía Alimentaria y las haga centrales y estratégicas”, destacó Bartolacci, fomentando el debate en torno al modelo productivo y el hambre, una “situación que habitamos y deberíamos considerar la gran vergüenza nacional”.
El rector hizo extensivo su reconocimiento a todas y todas las y los docentes e investigadores que trabajan sobre esta problemática y tomó el compromiso de que “la Universidad Nacional de Rosario asume, genuinamente , de manera estratégica y central, la agenda de la Soberanía Alimentaria, para discutir, producir conocimiento pero también para generar estrategias y herramientas institucionales que puedan transformarle la vida a la gente” , y el Rector profundizó que ” es inadmisible que desde la Universidad Nacional de Rosario no se trabaje junto a los gobiernos locales y regionales para generar políticas concretas, y no sólo estudios, cuando hay pibas y pibes que pasan hambre en nuestra región”.
Graciela Mandolini hizo un recorrido por la historia de Miryiam Gorban, a la que a sus 88 años definió como “una leyenda”, destacando su infancia en Santiago del Estero y su juventud en Buenos Aires como militante del Partido Comunista, así como su fuerte compromiso comunitario y su lucha por hacer de este mundo “otros mundos posibles y sin duda mejores”. La directora destacó que la causa de la vida de Miryam Gorban es procurar el alimento, que es cuidar de la salud, del cuerpo y de la vida con la implicación política que esto significa, en este sentido resaltó la participación de la homenajeada en los debates por la Ley de Emergencia Alimentaria en Argentina.
Miryam Kurganoff de Gorban destacó que la lucha debe ser por la verdadera sobreranía alimentaría, la independencia económica y la justicia social, y valoró la batalla que dan al modelo productivo las organizaciones ecologistas, contra el uso de agrotóxicos en la fumigación, la red de Cátedras Libre en Soberanía Alimentaria (CALISA). Consideró a CALISA como heredera de las banderas de la Reforma Universitaria, en su intención de “abrir las puertas de la Universidad para que sea más democrática y esté al servicio del pueblo”. La docente remarcó la contradicción que a traviesa nuestro país ” que los que íbamos a ser el supermercado del mundo estamos en emergencia alimentaria”.
También resaltó que la lucha es para que todos tengan un plato de comida “sana, segura y soberana”, y no con recetas salvadoras “de comida para pobres, que recomienda agregar más soja para remplazar la carne”. Para Kurganoff de Gorban el problema de la alimentación no se resuelve con medidas coyunturales sino que hay que cambiar la estructura del sistema alimentario, garantizando el acceso a la tierra de los pequeños y medianos productores, subsidiando la producción de alimentos sanos y no del monocultivo “por qué no pasamos a ser de los abanderados de la soja a exportar alimentos sanos, seguros y soberanos, valorando a los productos regionales y levantar banderas de la seguridad y la soberanía alimentaria”, remarcó la flamante Doctora Honoris Causa de la UNR.
Periodista: Ileana Carrizo / Fotógrafa: Camila Casero / Realizador: Andrés Aseguinolaza