Yanina Charchaflie, María Laura Gamst y Georgina Bosio comenzaron su carrera universitaria hace más de 20 años. Juntas, gracias la Programa rEGRESAR lograron recibirse.

El programa rEGRESAR de la Universidad Nacional de Rosario alcanzó más de 200 graduados en menos de tres años. La iniciativa, destinada a que estudiantes que interrumpieron sus estudios puedan finalmente completarlos, sumó un nuevo hito: las graduadas número 199, 200 y 201 obtuvieron su título en simultáneo, protagonizando una historia atravesada por la amistad, la constancia y la emoción del reencuentro.

María Laura Gamst, Yanina Charchaflie y Georgina Bosio ingresaron en 1998 a la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales para estudiar Comunicación Social. “Somos el ingreso con el que se iba a implementar la tesina por primera vez, por ende nadie sabía muy bien cómo iba a ser. Fue un aprendizaje continuo a lo largo de toda la carrera. Hicimos juntas casi todo el recorrido”, recordó Yanina.

En 2008, por distintos motivos, cada una tomó un camino diferente. Hoy viven en ciudades distintas: Georgina en Funes, María Laura en Rosario y Yanina en Bolivia, adonde se mudó por trabajo. “A Yanina y a mí sólo nos faltaba la tesina, mientras que a María Laura también la materia Taller de Tesina, que nosotras cursamos casi de casualidad porque en nuestra época no era obligatorio. Estábamos a nada de terminar, pero ese final se fue posponiendo”, contó Georgina.

Las tres amigas ingresaron en 1998 y se reencontraron para finalizar la carrera.

Cuando a finales de 2023 se abrió la segunda convocatoria del Programa rEGRESAR, las tres sintieron que había llegado el momento de saldar aquella deuda pendiente. “No sabía si esta vez iba a poder avanzar, porque antes volver a lo académico había sido una traba. Pero regresar a la Siberia para cursar el Taller de Tesina me ayudó muchísimo. Fue como reencontrarme, día a día, con la vida universitaria y pude ver la pasión que los docentes ponen en lo que hacen”, confesó María Laura.

Aunque sabían que las tres se habían inscripto al dispositivo, la sorpresa llegó cuando se reencontraron en el primer encuentro informativo. Como si el destino hubiese decidido que el camino que empezaron juntas debía terminar igual. “Nos enteramos de que existía una modalidad de tesina de producción que se puede hacer de a tres. No teníamos idea, porque antes, cuando estábamos cursando, sólo estaba la tesina de investigación. Ahí decidimos que queríamos cerrar esta etapa juntas, así que esperamos a que María Laura rindiera su última materia para arrancar con todo”, recordó Yanina.

Casi fue como volver el tiempo atrás, como si ese final de los años noventa y el primer tramo de los dos mil nunca se hubiera ido y la vida les diera una segunda oportunidad para finalizar aquello que había comenzado. 

Ese recorrido final no solo ordenó el proyecto de tesina, sino que también les permitió reconectar desde sus vidas actuales, tan distintas a las de dos décadas atrás. “A nivel laboral, familiar y personal cada una está en un lugar diferente. Eso cambia todo. Pero nos adaptamos, trabajamos virtualmente con constancia y logramos avanzar las tres juntas”, explicó Yanina. Georgina sumó: “Fue lindísimo volver a trabajar juntas. Nos conocemos mucho, y aunque la vida nos llevó por distintos rumbos, reencontrarnos en este desafío fue como volver el tiempo atrás”.

Esa sensación de volver a empezar también se reflejó en su producción final. Bajo la dirección de la docente Mariela Balbazoni, realizaron una guía digital destinada a acompañar a familias rosarinas en el uso saludable de dispositivos tecnológicos en la primera infancia, específicamente entre los 3 y 6 años. “Trabajar a distancia no fue un obstáculo. Teníamos una organización muy clara y cada reunión era realmente productiva”, señaló María Laura.

Autoridades de la Facultad de Ciencia Política, familiares, y seres queridos acompañaron este especial momento.

Llegado el gran día, los nervios reaparecieron, un condimento que no podía faltar. “Hacía muchos años que no vivíamos algo así. Entré casi en pánico, pero terminó siendo una experiencia tranquila, porque el jurado fue sumamente respetuoso. No nos hicieron sentir incómodas en ningún momento”, expresó Georgina. Yanina agregó: “Tuve que recordarme que no era un examen sino una exposición. Eso me permitió hablar con seguridad de un trabajo que llevábamos más de un año construyendo. Me sentí como si volviera a mis veinte”.

Es así que rodeados de familia y amigos, entraron por la puerta de la Facultad de Ciencia Política por última vez como estudiantes, y a casi 28 años de haber pisado por primera vez esos pasillos, salieron como licenciadas en comunicación social. Y como casualidad del destino, también como el rEGRESAR número 200. “No sabíamos nada, hasta que finalizó el exámen. Fue una alegría porque verdaderamente el programa nos ayudó mucho para que hoy tengamos nuestro título universitario. Aún no lo podemos creer”, confesó Yanina.

Para María Laura, aquella defensa fue mucho más que un trámite académico. “Me fui de la facultad siendo muy joven y volví siendo otra. Y me fui de la defensa de la tesina transformada una vez más. Fue un momento de disfrute enorme y de profunda movilización emocional”.

Las tres amigas dejaron un mensaje para quienes también sueñan con volver y terminar lo que dejaron pendiente. “Fue una experiencia enriquecedora. El rEGRESAR es un dispositivo que realmente funciona y permite que personas como nosotras puedan cerrar una etapa de la vida”, contó Georgina, a lo que María Laura agregó: “En mi caso, quise demostrarles a mis hijos que las cosas importantes hay que terminarlas: se trabajan, se pelean los miedos y las inseguridades. Y en ese proceso encontramos un apoyo inmenso por parte de la Universidad”.

El rector Bartolacci felicitó a las tres nuevas graduadas de la UNR.

Regresar a estudiar

El Programa rEGRESAR pone especial atención en aquellos estudiantes que han dejado su recorrido académico y adeudan el 30% de la carrera y/o que les falte realizar el trabajo final o tesina para graduarse.   

El rector Franco Bartolacci se hizo presente en la Ciudad Universitaria para felicitar a las tres nuevas egresadas. “Aguante la UNR que es capaz de hacer estas cosas, aguanten nuestras graduadas por su esfuerzo y decisión de volver a casa y terminar. En parte cuando hablamos de devolverle legitimidad a lo público, hablamos de que hay que trabajar para dejar de construir instituciones sin corazón ni alma. Nosotros queremos que las y los estudiantes dejen de ser números de legajos, sino que sabemos que cada una y cada uno es una historia particular de vida”.

Asimismo, enfatizó en la importancia que este programa tiene para la Universidad y la relevancia del trabajo de cada uno de los que participan en este proceso. “Quiero agradecer a quienes con su ejemplo de vida nos dan un mensaje a todos porque sabemos que no es fácil la decisión de volver y eso habla de una confianza en esta institución”, resaltó y añadió: “Están pasando cosas maravillosas en la Universidad, la expansión de la propuesta académica de la UNR es inédita y lo estamos haciendo en un contexto realmente adverso”.

Además, reflexionó sobre lo que significa poner en marcha esta iniciativa inédita por tercer año consecutivo. “Creo que esto implica dos cosas: dar cuenta lo que una institución como la nuestra debe ser, y que lamentablemente muchas veces no somos, pero además una verdadera declaración de principios. Muchas veces las mismas estructuras burocráticas son las que conspiran e imposibilitan que se cumpla el objetivo de la institución, por esto todas estás historias deben servir como mensaje para nuestra comunidad y para todos aquellos que aún están en la duda”. 

El Programa rEGRESAR ya cuenta con tres convocatorias y se sigue posicionando como un dispositivo diferenciador que permite que cientos de personas vuelvan a la vida universitaria para lograr ese tan ansiado título.

Distinción a los rEGRESAR 2025

El Área Académica y de Aprendizaje de la Universidad Nacional de Rosario distinguió a los últimos 130 graduados y graduadas que finalizaron sus estudios en el marco del Programa rEGRESAR, todos correspondientes al año 2025. Se trata de personas que, por distintos motivos, habían interrumpido su trayectoria universitaria y que, gracias a este dispositivo institucional, lograron retomar y concluir su formación académica. 

Cabe aclarar que si bien María Laura Gamst, Yanina Charchaflie y Georgina Bosio fueron las 199, 200 y 201 graduadas del programa, luego de ellas se recibieron 15 personas más durante la última semana en distintas facultades de la UNR, aumentando el número a 216.

En el mismo acto, se entregaron certificados de reconocimiento a las y los tutores que acompañaron los procesos de cursado y egreso, destacando el rol clave que cumplen en el sostenimiento y fortalecimiento de estas trayectorias educativas.

La ceremonia se realizó el viernes por la tarde en la Facultad de Odontología y estuvo marcada por un clima de profunda emoción y celebración. Familiares, amistades, docentes y autoridades universitarias acompañaron a las y los nuevos profesionales, quienes recibieron una distinción simbólica por haber alcanzado el título universitario, coronando un camino atravesado por el esfuerzo, la perseverancia y el compromiso. 

Durante el encuentro, las autoridades de la UNR felicitaron especialmente a las y los graduados por animarse a asumir este desafío, reafirmando la importancia de políticas públicas que promuevan la inclusión, el derecho a la educación superior y la igualdad de oportunidades.

Periodista: Gonzalo J. García / Fotografía: Secretaría de Comunicacion de la Facultad de Ciencia Política.