Estudiantes de la UNR están viviendo una experiencia de intercambio única en Alemania.

Siete estudiantes de la Facultad de Ciencias Exactas, Ingeniería y Agrimensura de la Universidad Nacional de Rosario fueron seleccionados para formar parte de las becas ALEARG-KOSPIE. 

Estas becas se desarrollan en Alemania y buscan combinar un semestre de estudio con el desarrollo de un proyecto en una Universidad o una práctica en una empresa. 

Anualmente viajan alrededor de 15 becarios y becarias de Universidades Públicas de toda la Argentina. En esta oportunidad, la UNR se quedó con la mitad de las plazas disponibles, marcando un precedente muy importante y poniendo en valor la formación de las y los estudiantes rosarinos. 

Las becas ALEARG-KOSPIE, surgen de un Convenio entre el Ministerio de Educación de la República Argentina y el Servicio Alemán de Intercambio Académico (DAAD) de Alemania. Los estudiantes que están viviendo esta experiencia son: Valentín Berman, Alejo Coronel, Alejandro Crosetti, Marina Fernández, Iván Kapovich, Nicolás López Tarallo, y Tomás Mariño.

La estructura del programa de estudios en Alemania consta de 2 meses de curso de alemán intensivo previo a las actividades formativas. Además, las y los seleccionados tienen la posibilidad de poder seguir asistiendo a cursos de alemán durante el primer semestre de sus estancias.

Durante el primer semestre, las y los estudiantes están radicados en una universidad alemana para la realización de una pasantía académica. Luego, se realizan de 4 a 6 meses de práctica supervisada por la universidad en una empresa alemana o, alternativamente, permanecer otro semestre en la universidad alemana y realizar un trabajo de investigación aplicada bajo la supervisión de un equipo de investigación.

La beca está abierta para todas las universidades públicas del país y está orientada a las carreras de ingeniería de todas sus especialidades (civil, electrónica, eléctrica, industrial, etc.). 

Experiencias en primera persona

Alejandro Crosetti, estudiante de Ingeniería Electrónica, adelantó que todo el proceso de postulación duró un año entero. “Fue todo un proceso de lo que estamos viviendo, particularmente aprendí un montón. La UNR siempre nos acompañó un montón, y en mi caso también los docentes de la carrera. Teníamos que presentar un proyecto de investigación para aplicar, y si no fuera por el compromiso de distintos docentes, no sé si lo hubiéramos logrado. Fue muy importante”

Crosetti valoró la gestión de la Facultad para que se puedan simplificar los trámites, y calificó como un acierto ya que Rosario ha aportado la mitad de los becarios y becarias para esta edición. “La Facultad de Ciencias Exactas había logrado en otros años también una alta participación. Sin embargo, este año somos muchos, lo que da cuenta de lo importante que es la formación”.

En palabras de Alejandro, la experiencia en Alemania está siendo “sensacional” y resaltó que los dos meses de curso intensivo fueron claves para que el idioma no sea una barrera en el desarrollo de la beca. “Tuvimos la oportunidad de conocer muchas personas de distintos lados del mundo. Este programa prevé traer un número similar de estudiantes provenientes de Colombia y México, así que conocimos también a mucha gente de latinoamérica. Yo ya estoy terminando el semestre de estudios y siento que mi formación no sólo está siendo completa académicamente sino también personalmente”, y añadió: “Ahora el reto es comenzar una pasantía, que realmente será un desafío ya que se convive con el idioma y distintas culturas”. 

Marina Eugenia Fernández es estudiante de Ingeniería Industrial, y actualmente se encuentra en la Universidad Técnica de Múnich. “Estoy haciendo materias y además trabajando en el Departamento de Ingeniería Civil Ambiental de la Universidad. Estoy realizando estudios que me van a servir para la tesina de grado cuando vuelva a Rosario”, contó a la distancia. 

Asimismo, resaltó que la UNR le ha brindado herramientas muy importantes para poder ser parte de este desafío. “La base que me ha dado la carrera es muy importante para poder estar acá, fue vital para que hoy pueda cursar las materias como una más. Creo que tenemos una base de formación de un muy buen nivel, sin contar la gran calidad humana que podemos encontrar en sus docentes”.    

Nicolás López Tarallo, tiene 23 años y es estudiante de Ingeniería Mecánica. Cuando conoció la existencia de esta beca durante sus primeros años de cursado, supo que era una experiencia que debía vivir si o si. “El deseo de ser uno de los seleccionados me motivó a dedicarme por completo a mis estudios y lograr el mejor rendimiento académico posible. Agradezco a mis profesores que me formaron a lo largo del camino, que me dieron bases sólidas que hoy me permiten desenvolverme con tranquilidad en la Universidad Técnica de Braunschweig”.

En esta unidad académica, no sólo cursa materias de maestría, sino que además trabaja en un proyecto de investigación que consta de la construcción de una turbina eólica a escala con propósitos educacionales. “Espero poder presentarlo como proyecto de final de carrera en mi regreso, aportando toda la información adquirida a la UNR”, comentó y agregó: “Agradezco la oportunidad que nos da la Facultad de considerar las prácticas laborales que realizaremos en nuestro último semestre de la beca como parte de nuestras prácticas profesionales supervisadas; experiencia totalmente enriquecedora, que nos permite conocer nuevas y distintas culturas laborales y tecnología de punta que podremos aplicar en nuestro regreso cuando nos incorporamos al mercado laboral”.

“Estoy orgulloso de representar a la UNR en Alemania, con la tranquilidad de saber que me respalda una formación universitaria de excelencia, que dieron por resultado los conocimientos suficientes para hoy poder trabajar a la par con futuros y actuales ingenieros de una de las más prestigiosas de Alemania”, valoró López Tarallo. 

Ivan Kapovich, estudiante de Ingeniería Industrial, también se encuentra en la ciudad de Múnich y valoró lo importante de esta vivencia para su formación profesional. “Actualmente estoy participando en un proyecto de investigación en la cátedra de Tecnología de Vehículos. Si bien, este área de conocimiento no se vincula con la parte troncal de la carrera de Ingeniería Industrial, todas las competencias que pude desarrollar en la formación universitaria me están ayudando mucho para desempeñar mis tareas aquí”.

Kapovich resaltó lo enriquecedora que es una experiencia de intercambio en este tramo de la carrera. “Es increíble conocer a personas de otras culturas, mucho más en un lugar tan multicultural como es Múnich, dónde no sólo hay alemanes sino también personas de todos los continentes. Se convive con personas con otros intereses, otro sentido del humor, otras creencias y formas de comportarse. Y eso siento que me hace crecer mucho como persona”.

Periodista: Gonzalo J. García