El Rector Franco Bartolacci participó de un encuentro para conmemorar el día mundial del derecho humano al agua.

Organizado por la Cátedra del Agua de la Universidad Nacional de Rosario, el Tercer Encuentro de Capacitación de las Escuelas Itinerantes del Agua, Clima y Consumidor, se realizó en la  Escuela Provincia de Corrientes. Con el objetivo de concientizar acerca de un derecho humano fundamental para la vida como es el agua, disertaron la Subsecretaria de Ambiente de la Municipalidad de Rosario Pilar Bueno quien se refirió al cambio climático, el Director de la Cátedra del Agua  Aníbal Faccendini y el Titular de la Oficina Municipal del Consumidor Antonio Salinas quienes hicieron hincapié en el cuidado y la  responsabilidad del consumo.

“Los jóvenes nos hicieron un llamado de atención acerca de cómo estamos cuidando el planeta porque hay un modelo de consumo consolidado a nivel mundial que atenta permanentemente contra los recursos naturales de nuestra casa común, que si los seguimos depredando como lo hicimos históricamente, se van acaban y de esta forma se seguirán profundizando las desigualdades e injusticias”, expresó el Rector Bartolacci frente a los alumnos de la mencionada escuela. “Para cambiarlo tenemos que modificar nuestra forma de vivir”, subrayó.

El Rector sostuvo que cuidar y preservar el ambiente requiere mucho compromiso del Estado en todos sus  niveles y también de los ciudadanos. “Desde la Universidad apuntamos a  construir socialmente ese compromiso”, expresó. “Nos compromete mucho como Universidad la problemática del agua que existe en los barrios de la ciudad porque nadie puede vivir si no tiene este derecho humano básico, algo tan simple y relevante”.

El encuentro fue organizado por la Cátedra del Agus de la UNR

Anibal Faccendini y Antonio Salinas se refirieron a la responsabilidad en el consumo. Explicaron que Rosario está entre las ciudades que más agua derrocha pero por otro lado, hay 120.000 personas que viven en barrios periféricos que no tienen acceso al agua  lo que genera una gran desigualdad. “En muchos de esos barrios deben ir a buscar agua en tachos a otros sectores  o son provistos con cubas a través de camiones cisternas”, contaron a los chicos que escuchaban atentamente en uno de los salones de la escuela. Para graficarlo, expresaron que un ciudadano que vive en el centro de la ciudad consume 350 litros de agua por día mientras que una familia de un barrio periférico sin acceso al agua sólo tiene 400 litros para cuatro días.

Por otro lado, Faccendini resaltó que Rosario es la primera ciudad que estableció el derecho humano al agua y al saneamiento, cuando ningún otro país lo institucionalizó aún. Desde el punto de vista científico, “el derecho al agua significa que no se paga, se ejerce, pero lo que sí tenemos es la obligación de cuidarla”.

Periodista: Victoria Arrabal/Fotógrafa: Camila Casero