La UNR sumó un 25 por ciento más de ingresantes respecto del año anterior. En 2024 se inscribieron 25.808 estudiantes a carreras de grado, unos cinco mil más que el año anterior. Nunca antes en la historia de la UNR hubo un salto tan significativo de un año a otro. De esos, son 4 mil los que optaron por nuevos trayectos como Turismo, Diseño, Corretaje, Inteligencia Artificial y Seguridad Ciudadana.
La apuesta por carreras más cortas, trayectos compartidos por varias facultades y diseños curriculares demandados por los estudiantes y por las necesidades laborales, se vio reflejada en un crecimiento exponencial de la matrícula de inscriptos a carreras de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) que en 2024 sumó un 25 por ciento más de ingresantes que el año anterior.
Los números muestran que en 2023 fueron un total de 20.667 personas que se anotaron para iniciar sus estudios universitarios, de los cuales 3.348 estudiantes optaron por nuevas carreras como Turismo, Diseño Industrial, Gestión Cultural, Inteligencia Artificial, Diseño Gráfico, Diseño de Indumentaria, Corretaje Inmobiliario, y Seguridad Ciudadana. Ya en 2024 ese dato se incrementó de manera notable, sumando 25.808 inscriptos a todas las carreras, siendo 3912 quienes eligieron alguno de los nuevos trayectos. Si la estadística se extiende hacia atrás en el tiempo, se ve que de 2012 a 2023 aumentó un 40 por ciento la cantidad de ingresantes.
La cifra de preinscriptos de 2024 avala el desafío que fue para la UNR invertir en la implementación de estas carreras, con todo lo que significa emprender la construcción de planes de estudio, de abarcar los requerimientos del ámbito de la ciencia y la producción, de incluir las nuevas tecnologías, y de garantizar el cumplimento efectivo que implica recibir a más estudiantes para los cuales se necesitan más docentes, más aulas, más edificios. Los nuevos trayectos académicos tienen en común además que la duración es de cuatro años, un dato significativo a la hora de elegir una carrera universitaria.
“Nunca antes nuestra Universidad tuvo un incremento tan fuerte de su matrícula de un año a otro como ahora. Y el elemento decisivo para provocar esto fue habernos decidido a multiplicar la propuesta de formación, sumar trayectos innovadores, más cortos y en sintonía con la expectativa de los jóvenes de hoy y las necesidades que impone el mundo que vivimos. Haber sumado turismo, diseño, inteligencia artificial, seguridad y corretaje permitió que cientos de jóvenes encontrarán en la Universidad trayectos de formación profesional en áreas que tradicionalmente no estaban contempladas en nuestra propuesta”, indicó Bartolacci para explicar el fenómeno. Complementariamente, señaló que “un contexto de crisis como atravesamos, seguramente influya también en la progresión de estudiantes que eligen optar por la Universidad Pública para continuar con sus estudios”.
“Para nosotros es una gran noticia y confirma que el trabajo que demanda este objetivo vale la pena. La puesta en marcha de cada una de estas carreras implicó un esfuerzo enorme de la Universidad y ver que ese esfuerzo redunda en miles de jóvenes que hoy las cursan, en un incremento de la matrícula tan significativo, es muy reconfortante”, sostuvo el Rector. “Tuvimos que garantizar cargos docentes, resolver y proyectar infraestructura y no recibimos presupuesto adicional o específico para hacerlo, sino que lo hicimos optimizando nuestros recursos, ingeniando respuestas, esforzándonos al máximo para que la necesidad de poner en marcha una nueva carrera pueda ser realidad. Algo que nos permitió cumplir con esa meta fue pensar estas nuevas carreras ya no como trayectos particulares construidos desde una Facultad sino en alianzas colaborativas entre distintas Facultades, lo que no sólo garantiza aprovechar mejor los recursos, sino construir abordajes curriculares más integrales, ineludibles en el mundo en que vivimos, porque ya ningún fenómeno se explica desde una sola disciplina. Además, para crear estos trayectos escuchamos a las voces que había que escuchar, convocamos a instituciones, al sector productivo, al Estado y la sociedad civil para que nos ayuden a diagnosticar bien lo que hacía falta, algo que no siempre sucedió en el ámbito académico, porque la mayoría de las veces se conservaba la propuesta tradicional o se ponía en marcha alguna carrera nueva sin tener demasiado registro de las necesidades de la región. Creo que este es un signo saludable, un cambio de paradigma muy importante en nuestra institución que debemos sostener”, indicó.
“Sin dudas un rasgo distintivo de estos últimos años es la multiplicación de la propuesta de formación académica en todos los niveles, en particular en el nivel medio y en las licenciaturas. En estos 4 años el crecimiento fue inédito, y el desafío es seguir por este camino, aún en las condiciones difíciles que atravesamos, porque las estadísticas son muy claras y demuestran que es esto lo que debemos hacer. Cuando decimos que en un mundo que cambia vertiginosamente la Universidad debe pensar también que cosas debe transformar o hacer para estar en sintonía con esa agenda, nos referimos entre otros desafíos a este. Y por esta razón pedimos con tanta energía se reconozca la necesidad de incrementar razonabalmente el presupuesto que el Estado nacional nos asigna. Por este rol estratégico que tiene la educación superior. Poder contar que miles de jóvenes se suman con su expectativa y sus sueños a formarse en la Universidad pública es maravilloso, pero eso debe acompañarse con inversión que permita garantizar que todo esto podamos hacerlo bien”, destacó Bartolacci.
Una de las explicaciones a este incremento de estudiantes fue el boom que significó la incorporación de las carreras de Diseño Gráfico y Diseño de Indumentaria que ahora en 2024 inician su segundo año. En su cohorte inicial, en 2023, entre las dos sumaron 2.275 estudiantes, mientras que este año son 1670 los que empiezan este recorrido académico. Mientras que Diseño Gráfico se dicta en la Facultad de Arquitectura, Diseño de Indumentaria es alojada en las aulas de la Facultad de Humanidades, aunque ambas tienen contenidos compartidos por las dos Facultades. Son trayectos formativos que antes sólo se podían estudiar en el circuito privado y que se sumaron a la oferta de grado gratuita de la UNR. Son apuestas que además están vinculadas al desarrollo productivo e industrial de la región.
Y este año 2024 empiezan a rodar otras dos nuevas carreras que fueron muy demandadas como Seguridad Ciudadana, con 485 inscriptos, y Corretaje Inmobiliario, con 408 anotados. La primera tendrá una duración de cuatro años y combinará una modalidad de cursado virtual y presencial con sede en las facultades de Ciencia Política y de Derecho. Es la primera carrera de grado en toda la historia de la UNR que en su plan de estudios estipula la hibridez.
En el caso de Corretaje, la UNR se ha convertido en la primera Universidad Pública del país en abrir una oferta académica gratuita de grado en esta temática, con un plan de estudios creado en conjunto con el Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario (Cocir), con un formato curricular flexible que se traduce en el dictado cuatrimestral de las asignaturas, con un fuerte componente de práctica profesional. En el marco de la tendencia actual de trayectos más cortos, la extensión será de cuatro años.
La Tecnicatura Universitaria en Inteligencia Artificial tiene una duración de dos años y medio con prácticas en el Polo Tecnológico Rosario y empresas de software de la región. Empezó en 2022 con 247 inscriptos, siguió en 2023 con 332, y en 2024 son 601 los anotados, siendo la carrera con más ingresantes de la Facultad de Ingeniería. La propuesta resulta atractiva porque es corta y cuenta con cursada mixta, algunos días presencial en el edificio de Pellegrini al 250 y otros días de manera virtual, pero sobre todo porque se trata de una carrera que está bien en sintonía con lo que el mundo y el desarrollo de las tecnologías está necesitando.
La Licenciatura en Turismo fue la que dio el puntapié inicial, la que rompió el molde y se abrió paso entre las carreras tradicionales de la UNR, la que por primera vez combinó la gestión conjunta de dos unidades académicas, con base en Ciencias Económicas y en Ciencia Política. En 2023 fueron 436 los ingresantes y este año son 562. La planificación originaria fue dando sus frutos y hoy ya se reciben profesionales con competencias para desempeñarse en dos grandes áreas: el turismo como actividad económica; y como materia de política pública.
Carreras más cortas
En junio del año pasado el Consejo Superior de la UNR aprobó la reglamentación para que las carreras de grado sean más cortas y promover la modernización de los programas de estudio, con el objetivo de adaptar la UNR a contextos globales en permanente cambio.
El mínimo de horas exigidas por el sistema nacional o los órganos de acreditación respectivos, será tomado por la Universidad Nacional de Rosario como cantidad máxima posible. De esta forma, la UNR es la primera Universidad Pública en concretar esta transformación en los trayectos académicos formativos. Así, en las nuevas carreras, la carga horaria total del plan de estudio no superará el mínimo establecido por normativa nacional o por los estándares definidos por instituciones de acreditación nacional o regional.
Periodista: Micaela Pereyra / Fotógrafa: Camila Casero, Karen Roeschlin